CARTA #86
Te conocí como a cualquier persona, pero nunca imaginé que iba a sentir algo tan puro por ti. Comencé a sentir algo en mi corazón que aceleraba más y más cada vez que te veía. Cuando te vi, pude capturar y sentir algo inigualable. No fue amor a primera vista, pero sí hubo algo ese día, una chispa en tu mirada que encendió mi mundo. Esa mirada, dulce y hermosa, me desafiaba a acercarme al precipicio de tu piel. Tienes una forma de mirar que me dejaba atrapado, como si estuviera perdido en un punto fijo en tus ojos. Cada vez que te observaba, perdía la noción del tiempo y me sumergía en un mundo solo nuestro. Poco a poco, fuiste llenando mis pensamientos y mi corazón. Esa conexión especial que sentía contigo se fue fortaleciendo, y aunque al principio solo era una chispa, ahora siento que es una llama ardiente que ilumina mi vida. Estoy emocionado por descubrir qué más nos depara el destino y conocer la persona maravillosa que está detrás de esa mirada que me robó ...