CARTA #64
Sus ojos son como dos constelaciones en el firmamento de su rostro, brillando con la luz de mil galaxias, Su voz, dulce y melodiosa, cada palabra que pronuncia es como una nota musical que resuena en mi interior.
El cabello que enmarca su rostro es como un velo de ensueño que oculta y revela a la vez. Cada hebra parece tener vida propia, moviéndose con gracia y fluidez como un río de sentimientos que fluye de su ser.
Sus labios, cuando se curvan en una sonrisa, cada beso compartido es un vínculo que nos une en un abrazo emocional, trascendiendo el espacio físico.
Pero más allá de todo esto, lo que más admiro es su capacidad de amar y luchar. A pesar de las tormentas que ha enfrentado, sigue irradiando amor en cada acto, en cada palabra. Su valentía para abrir su corazón a pesar de las heridas pasadas es un testimonio de su nobleza y fuerza Interior.
RECUERDA: En medio de todo este silencio, tu risa me hace volver a vivir.
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