CARTA #124

 

Tengo miedo....

Tengo miedo... miedo de dejarme llevar por este amor que siento por ti. Parece una tontería, ¿verdad? Pero es la verdad, me da miedo.

Me enamoré de ti, más de lo que jamás imaginé posible, y eso me asusta. Porque mientras el tiempo sigue su curso, este sentimiento por ti no hace más que crecer, en lugar de desvanecerse como esperaba...

Cada día que pasa, para ti podría ser solo otro día más, pero para mí, es un día más añorándote, extrañándote. Tengo miedo...

Tengo miedo de abrir los ojos y no encontrarte, de soñar despierto con un futuro juntos que quizás nunca llegue. Me asusta la idea de que todas estas emociones que llevo dentro sean solo castillos en el aire, sueños sin fundamentos.

Y sin embargo, aquí estoy... pensándote, queriéndote en silencio. Porque sí, te quise y te quiero, y no sé cómo dejar de hacerlo. Me asusta que este amor se convierta en mi sombra, en mi silencio, en esa voz que me susurra que no puedo, que no debo amarte...

Pero la verdad es que te amo, en silencio, desde lejos, sin esperanza de ser correspondido. Y eso, ese amor no correspondido, es lo que más miedo me da. Me aterra la idea de que tal vez, solo tal vez, también tú sientas algo, pero el miedo nos mantenga separados.

Te amo... te amo de una manera que nunca pensé posible. Como alguien que mira las estrellas y sueña con tocarlas, sabiendo que están fuera de su alcance. Y aunque trate de esconderlo, de disimularlo, este amor me define, me consume...

Tengo miedo de que el amor sea solo una palabra para ti, mientras que para mí, es todo mi mundo. Tengo miedo de este silencio que se interpone entre nosotros, de este abismo que parece crecer cada día más.

Me da miedo pensar que tal vez nunca sepas cuánto significas para mí, que nunca escuches estas palabras que llevo dentro, que gritan tu nombre en el silencio de la noche. Tengo miedo de seguir amándote en secreto, de que mi amor por ti sea solo un susurro en el viento...

Tengo miedo, sí, pero aquí estoy, escribiéndote estas líneas, con la esperanza de que, de alguna manera, lleguen a ti, de que sientas este amor que llevo dentro y que, quizás, no tenga el valor de decirte en voz alta.

Tengo miedo... porque este amor es el poema más hermoso que jamás he compuesto, y la idea de que nunca lo leas, de que mis palabras se pierdan en el vacío, es la tristeza más profunda que conozco.


RECUERDA: Solo hay un remedio para el amor: amar más.




Comentarios

Entradas populares de este blog

CARTA #141

CARTA #140

CARTA #2